
ORÍGENES DE LA IGLESIA CRISTIANA SINCRÉTICA
Para hablar de nuestro origen, debemos remontarnos al Nazareato, movimiento llamado también Nazirim, instituido por Moisés, quien mantuvo la pureza del Monoteísmo Hebreo, que fue instituido por Abraham a quien Melquisedec le reveló la existencia de un único Dios, el Padre Creador. Algunos Jueces, Profetas y, aún, el mismo Jeshua o Jesús, pertenecieron y fueron producto de este movimiento.
La historia de nuestra Iglesia o Escuela estuvo muy relacionada, también, con el Movimiento Esenio, al cual también perteneció Cristo. El Movimiento Esenio practicaba la síntesis de la Fe razonada y la sencillez del Culto, los Esenios no aceptaban tradiciones ni prescripciones vanas, tampoco formulismos exteriores, sino la verdadera religión interior que lleva al aprendizaje continuo y, como consecuencia, a la evolución compartida con el prójimo.
Esta doctrina se proyecta en la Escuela Rabínica que constituyera el Mesías, al renovar la Ley y depurar las Prescripciones, en contra de la ignorancia de las tradiciones y costumbres mecánicas y superficiales. Asimismo combate la limitación inducida por miedo y no por el respeto y la sincera convicción y comprobación científica de las teorías y hechos, por parte del hombre, haciendo hincapié en la Libertad y en la Responsabilidad, pero siempre actuando por Amor.
Luego de la muerte física del Cristo, este movimiento continuó en pequeños grupos o congregaciones, considerados gnósticos y por ser una religión que buscaba la iluminación interior tuvo que mantenerse oculta. En especial, cuando se crea el “Cristianismo Paulino,” usando los escritos de Saulo de Tarso, que fueron distorsionados y acomodados para acaparar poder y dominio sobre la gente, al percibir la forma en que los primeros seguidores vivían con sus ideas y las defendían, a veces a costa de sus propias existencias.
El Movimiento Nazareo Cristiano fue perseguido porque estaba en contra de toda manipulación e influencia del poder religioso y político de turno, en contra del negocio que brindaba la mezcla entre religión, política y poder. Luego de varios siglos de persecuciones, prohibiciones e injurias, hubo períodos de desmembramientos y reuniones que afianzaban nuevamente el disminuido legado del Movimiento.
En el año 1980 se elabora la primera manifestación doctrinaria y teológica, y se logra la oficialización de la Institución en la República Argentina. Sale el expediente de la Dirección de Cultos no católicos del Ministerio de Educación y Justicia, con el Número 1122.
Se acepta como nombre de nuestra Institución el de Iglesia Cristiana Sincrética, aunque también es considerada la denominación de Escuela Hebrea Nazarea Cristiana. Haciendo notar que sincretismo significa la unión de todas las verdades diseminadas entre las doctrinas y filosofías, bajo el amparo de la Ley de Dios, afirmada, dulcificada y universalizada por el Gran Rabí Jesús.